domingo, 22 de noviembre de 2009

Mou-te per l'ensenyament


La Plataforma per l'Ensenyament Públic torna a les mobilitzacions.

1 DE DECEMBRE DEL 2009 A:

VALÈNCIA
Palau de la Generalitat. Plaça Manises. 19h.


ALACANT
Servei Territorial. C/ Carratalà. 19h.


CASTELLÓ
Servei Territorial. Casa dels Caragols. 19h.


Reivindicacions de la Plataforma:


1) La immediata constitució d’una xarxa pública de 0-3 anys que siga columna vertebral del país i que en el curs 2009-2010 atenga a tot l’alumnat.


2) Creació de 300 places de llengua estrangera que garantisca que a l’inici del curs 2009-2010 eixa llengua s’ensenye amb eficàcia en totes les unitats de quatre i cinc anys.


3) Començament i finalització l’any 2009 d’una negociació amb els agents socials i escolars d’un nou mapa escolar que done resposta a les noves necessitats d’escolarització.


4) Les plantilles reals i necessàries de tots els centres públic s’han adequar a les necessitats actuals (ja que l’existent xarxa, que s’arrossega des de 1997, s’ha quedat desfasada) i eixos centres han d’estar constituïts en la seua totalitat per personal docent amb destí definitiu en el centre.


5) La catalogació lingüística immediata dels llocs de treball de secundària, prèvia negociació en els àmbits que corresponga.


6) L’efectiva matriculació equilibrada de l’alumnat amb necessitats educatives especials en tots els centres sostinguts amb fons públics, modificant el Decret pel qual es regula el procés de matriculació i creant les comissions estables de matriculació de districte o localitat.


7) Adoptar quantes mesures es consideren necessàries per tal que l’alumnat, quan acabe l’ensenyament primari, tinga les competències bàsiques per a expressar-se correctament en les dues llengües oficials i per a comunicar-se en una llengua estrangera.


8) Disseny, execució i avaluació de l’eficàcia de tots els programes que calguen per a compensar les deficiències de l’alumnat per tal que no abandonen el sistema educatiu durant les etapes obligatòries i obtinguen el títol de Graduat. Que servisquen d’exemple els programes de compensatòria: centres que any rere any demanen programes de compensatòria i ni són places estables, ni tenen professorat estable adscrit a elles.


9) Adopció de mesures motivadores per a què l’alumnat amb titulació de Graduat en Educació Secundària continue realitzant estudis postobligatoris, sobretot, aquells de Formació Professional de Grau Mitjà i Superior necessaris perquè siga factible un desenvolupament econòmic i social sostenible del nostre país.


10) Que siguen cessades totes aquelles persones que estan desenvolupant amb caràcter temporal funcions d’inspecció per designació directa dels responsables polítics de la Conselleria d’Educació i se convoque un procés selectiu amb el més escrupolós respecte als principis de publicitat, igualtat, mèrit i capacitat.


11) La màxima neutralitat de l’administració i la fi d’actuacions partidistes encaminades a controlar les juntes directives dels centres escolars.


12) Retirada de l’Ordre d’Educació per a la Ciutadania i paralització de qualsevol procés administratiu iniciat contra el professorat o juntes directives.


13) Beques de transport i menjador escolar per a l’alumnat d’educació infantil, de batxillerat i de formació professional, i gratuïtat en tot el procés escolar.

viernes, 30 de octubre de 2009

CHARLA SOBRE LA ASOCIACIÓN DE ALUMNOS

CHARLA PARA LOS ALUMNOS INTERESADOS EN LOS MOVIMIENTOS ESTUDIANTILES DENTRO DEL IES

El próximo lunes 9 de noviembre y el jueves 12 de noviembre a la hora del recreo, en la sala de usos múltiples tendrá lugar una charla sobre los movimientos estudiantiles dentro del centro. Los temas a tratar serán:

1- Asociación de Alumnos.
1.2- Sería mejor que los interesado tubierais clara cual será la futura junta.
2-Consejo Escolar.
3- Elecciones al Consejo Escolar.
4-Junta de delegados.
5-Delegados y subdelegados.

Se ruega la máxima asistencia, ya que el futuro del IES está en vuestras manos.

AAIESV

domingo, 13 de septiembre de 2009

LA VUELTA AL IES



La vuelta a la rutina

Ya está aqui la vuelta a las clases, lo que significa el comienzo de un nuevo curso.
Un nuevo curso donde los alumnos y las alumnas del centro vamos a convivir con alumnos, profesores y trabajadores durante varios meses. Esta convivencia debe de ser la adecuada.
Desde la Junta directiva de la Asociación de Alumnos del IES Vilamarxant queremos hacer una llamamiento a todos los alumnos y alumnas del IES y comunicaros que este nuevo curso HAY QUE RENOVAR LA JUNTA DE LA ASOCIACIÓN DE ALUMNOS. Esta es una tarea importante, ya que nuestra voz tiene que ser escuchada por la directiva del IES. Tenemos que velar y luchar por nuestros derecho y hacer llegar a la Junta de Delegados y Subdelegados nuestras propuestas de mejora para garantizar una mejor convivencia durante el curso 2009-2010.
Por todo esto es necesario que se forme un nuevo grupo que organice la asociación y que lleve a cabo todo tipo de actividades deportivo-culturales.

Así mismo, también deberán de haber elecciones a Consejero Escolar, ya que sin estas personas nuestra voz no puede ser escuchada y tenida en cuenta por el máximo órgano de decisión, donde están representados los padres, profesores, ayuntamiento, junta directiva del ies y alumnos.

Sin nada más que decir, desde la Junta de la Sociación de Alumnos saliente os deseamos un feliz y buen curso 2009-2010 y os animamos a que participéis activamente en los órganos que nos representan.

AAIESV

miércoles, 22 de abril de 2009

VAGA I MANIFESTACIÓ

Bolem una educaSió de Beritat ho exigim els estudiants !!!



La manifestació será el 28 d´abril a les 19:00 H a la Pl. Manises (València)

VINE AMB NOSALTRES I NO VAGES A CLASE, DEFENSA ELS TEUS DRETS, JUNTS TENIM MÉS VEU !!

VAGA I MANIFESTACIÓ

VAGA I MANIFESTACIÓ 28 D´ABRIL




La plataforma fa una crida a la comunitat educativa per a aturar el sistema educatiu el 28 d´abril

La manifestació serà a la Pl. Manises ( Valencia ) 28 D´abril

Vine amb nosaltres i no vages a clase, defensa els teus drets, junts tenim més veu !!

Bolem una educaSió de Beritat ho exigim el estudiants !!!

jueves, 5 de febrero de 2009

NORMAS DE FUNCIONAMIENTO GENERAL DEL CENTRO

NORMAS DE FUNCIONAMIENTO GENERAL DEL CENTRO

Desde la Junta de Delegados se propuso hacer una propuesta de renovar las normas de funcionamiento del centro. Las reforma hecha por los alumnos es la que está bajo. Hay que añadir que NO ESTÁN APROBADAS TODAVIA.Estas se presentaron en el pasado consejo escolarcelebrado el pasado 29 de enero. Se decidió en el mismo que se trabajarán en el próximo consejo escolar.




1. Los alumnos accederán a las aulas a través de las puertas delanteras del hall que dan acceso a la conserjería y a los despachos de administración y dirección. Igualmente lo harán los profesores y visitantes.
2. La asistencia a las clases y otros actos organizados por el Instituto son obligatorias.
3. Durante el cambio de clase sonarán dos sirenas, la primera indicará el final de la clase y la segunda el inicio de la otra y sonará dos minutos después.
4. Una vez suene la sirena del descanso, los alumnos saldrán al patio por la puerta más próxima al mismo. Así mismo todas las puertas que tienen acceso del centro al patio estarán abiertas para facilitar la llegada de los alumnos a las clases de E.F. o tecnología y por motivos de seguridad.
5. Los WC permanecerán cerrados en las horas de clase. Los alumnos que necesiten ir al WC en horas de clase lo comunicarán al profesor de su aula. Si este se lo permite irán al conserje a pedirle las llaves de los WC. Posteriormente se apuntarán en la lista de seguimiento del WC. Por último devolverán las llaves al conserje.
6. Los desperfectos ocasionados por el mal uso, abuso o maltrato del material e instalaciones de las diversas dependencias del Instituto las pagarán sus responsables.
7. Los alumnos son los responsables de su aula. Al acabar la última clase ordenarán el aula y subirán las sillas sobre las mesas.
8. Golpear puertas, pintar o rayar paredes, escribir sobre las mesas o en cualquier mueble serán objeto de amonestación verbal, falta grave o muy grave por parte del profesorado y en todo caso el que lo haga estará obligado a limpiarlo, restituirlo o arreglarlo.
9. No se permite comer, ni beber, ni comer golosinas en las aulas. Solo se estará permitido beber agua en las aulas.
10. Está prohibido fumar en todas las dependencias del centro.
11. Los pasillos y las aulas deberán permanecer limpias de papel o de cualquier suciedad. Los alumnos deberán desenvolver los bocadillos en el patio y tirar los envoltorios a las papeleras.
12. El hall es la zona de acceso restringido a los alumnos. Nada más podrán acceder a él para ir a conserjería, llamar por teléfono y para hacer gestiones administrativas a la zona de Administración y Dirección.
13. Los alumnos tendrán la libertad de decidir su disposición en clase al inicio de curso. Posteriormente el tutor y el profesorado decidirán el orden más conveniente, siempre pensando en el mejor funcionamiento del aula y en beneficio de los alumnos.
14. Los alumnos se desplazarán por los pasillos correctamente y en silencio por evitar molestias. Está prohibido permanecer en los pasillos, correr por ellos y gritar.
15. Los profesores que estén en el aula en la hora anterior al descanso cerrarán las aulas una vez finalizada la clase para evitar robos o incidentes dentro de las mismas.
16. La puntualidad es una norma de educación a parte de una exigencia social y laboral. A primera hora de la mañana habrá un periodo de 15 minutos para entrar a las aulas, de 7:45 h a 8:00 h. Así mismo, habrá un periodo de cortesía de 10 minutos, de 8:00 h a 8:10 h, para acceder al centro, pero no al aula para no interrumpir. Este alumno deberá permanecer en la sala de guardias hasta el comienzo de la segunda hora. Los alumnos que traigan un justificante podrán acceder al centro al Centro a cualquier hora, pero se tendrá que esperar al inicio de la siguiente hora para entrar en el aula.
17. La higiene, el aspecto externo, las palabras y expresiones malsonantes serán aspectos a observar y en su caso, corregir o sancionar.
18. Las faltas de asistencia se justificarán al tutor el día siguiente después de producirse. En el caso de que el alumno que falta a clase, por motivos justificados, haya perdido algún examen, este llegará a un acuerdo razonable con el profesor que imparta la materia de dicho examen.
19. Cualquier recurso a la violencia física, psicológica o verbal, riñas, amenazas, coacciones, ha de ser desterrado de nuestro Instituto. Aprender a ser/convivir es esencial. El profesorado sancionará las malas actitudes en este centro.
20. No está permitido salir del centro, salvo con permiso de algún miembro de la dirección y previa petición por escrito de los padres. Así mismo, en caso de falta del profesor en las últimas horas, los alumnos mayores de edad o con carnet verde podrán salir del centro.
21. El alumno que impida el normal desarrollo de la clase y no atienda a las indicaciones o advertencias del profesor podrá ser expulsado del aula, presentándose inmediatamente en la sala de guardia.
22. La biblioteca permanecerá siempre abierta, estando un profesor al cargo de esta para que el alumno, en caso de no tener clase o en hora del patio pueda acceder a esta para consultar, pedir o entregar libros.



AAIESV

lunes, 26 de enero de 2009

Bienvenido a Gaza, bienvenido al infierno

Bienvenido a Gaza, bienvenido al infierno

A mi lado, en la carretera, pasan coches con jóvenes que van a la playa, que llevan en el techo tablas de surf, bicicletas. A ambas orillas de la ruta se suceden campos verdes, casas de madera, centros comerciales, Mc Donalds. Es un día de sol radiante. En esta parte del país, próxima al mar, prima un aire festivo, relajado, ya que las vacaciones acaban de empezar en Israel.

Resulta difícil creer que a pocos kilómetros de aquí haya una realidad distinta. Cuesta imaginarse que diez o veinte minutos no separan del lugar más acosado, sitiado y estrangulado del mundo: Gaza. Donde más de un millón de personas carecen de agua corriente, electricidad y alimentos, además de padecer cada noche el azote de los misiles, los tanques y las artillería pesada de Israel.



Pero cuando el taxi que me lleva desde Jerusalén abandona la vía principal y toma el desvío hacia Ashkelón, aparece en el fondo una gran humareda negra, señal inequívoca de que estamos en la ruta correcta, de que Gaza, con su infinito dolor, existe.

A medida que nos acercamos, escuchamos el ruido de misiles que caen. Un zumbido fugaz y luego una gran explosión. Preocupado, el taxista para el coche a un lado de la carretera y enciende la radio. Acto seguido, me mira por el espejo retrovisor y me pregunta: ¿Estás seguro de que quieres ir a Gaza? Me río. Afortunadamente, no me hace la pregunta dos veces.



Erez es una base militar israelí que también sirve de check point. Dos soldados me paran: ¿llevas armas? Les digo que no y sigo. Me ponen el sello de salida de Israel. Y recorro un largo pasillo, bajo cámaras de televisión, que una época estaba atiborrado de gente que entraba y salía de Gaza. Ahora, desde el cerco israelí, está desierto.



Mientras avanzo pienso en el libro que estaba leyendo en el taxi. La primera obra de Amira Hass, periodista judía que se fue a vivir en Gaza para conocer el día a día de los palestinos bajo la ocupación. Una mujer brillante, de un gran coraje, que es acusada por muchos de traidora y antisemita pues defiende que, para terminar con la violencia, Israel debe abandonar Palestina.

Amira Hass vivió en los años noventa en Gaza, donde escribía para el periódico Haaretz. En su libro, Drinking the Sea at Gaza, afirma que lo hizo porque eso es lo que le enseñaron sus padres, dos supervivientes del Holocausto. Su madre le dijo que mientras la llevaban al campo de concentración el tren se detuvo en una estación, y las mujeres alemanas que estaban allí las miraban con indiferencia, mientras ellas iban abarrotadas en los vagones, como animales, rumbo a la muerte.

"Cuando veas a alguien padecer una injusticia, no lo mires con indiferencia, haz algo", le enseñó.

Y es por esta razón, según explica en su libro, que dejó su acomodada vida en Tel Aviv y se fue a vivir con los palestinos, para dar testimonio al mundo de su sufrimiento, para no permanecer indiferente ante las injusticias que padecen, a esos trenes en los que están atrapados, como animales, y que los llevan a ninguna parte.

Otra frase del libro de Amira Hass reverbera en mi cabeza a medida que camino hacia el lado palestino del check point. Cuando un israelí quiere mandar a otro a la mierda, no le dice vete al infierno, sino: ¡Vete a Gaza!

* * *

El contraste no puede ser más notable. Así como Israel vive en un próspero siglo XXI de amplias carreteras, centros comerciales, coches último modelo y gente despreocupada y bien vestida, Gaza da la impresión de estar aún en una lóbrega y paupérrima Edad Media.



La mayor parte de los vehículos con los que me cruzo apenas entrar, y a los que saco fotos desde el coche, son carros tirados por burros o caballos. Las calles están desiertas. De vez en cuando frenamos en las esquinas para dejar paso a algún coche destartalado, cubierto de polvo. Porque si hay algo que parece caracterizar a Gaza en estos primeros instantes de encuentro es el calor infernal, y el polvo. Aquí, al no contar con recursos para sistemas de irrigación, el desierto no es verde como en Israel, el desierto es árido, irrespirable.



También descubro en las calles, en nuestro trayecto al hotel, montañas de tierra que los milicianos utilizan para tratar de detener a los tanques israelíes, para dispararles, vanamente, con sus AK 47. Y banderas de grupos armados, por todas partes, en el techo de las casas. Como si la población entera estuviera en pie de guerra contra las tropas israelíes.

Finalmente, me conmueve la decrepitud de los edificios, que parecen caerse a pedazos, los esqueletos oxidados de coches que ya nunca más irán a lugar alguno, y la basura que se acumula por doquier. No hay agua, no hay electricidad, y los desperdicios se suceden en cada esquina, en cada acera, en cada descampado. Como bien señalaban los comunicados de ONG que leí esta mañana, entre los que destaco el de Acción contra el Hambre, la crisis humanitaria, si Israel no levanta el cerco, está próxima, es inminente.



En el hotel hay apenas unas horas al día de electricidad, debido a un generador a gasolina. Me preocupa saber cómo voy a conectarme a Internet y escribir este blog. Pero ahora lo importante es salir y buscar las historias, ver cómo es la vida en esta Gaza que lleva dos semanas sitiada, cerrada a cal y canto.

Munir, el conductor, me lleva a ver el barrio de Beit Lahia, donde hace unos días entraron los tanques israelíes. Noto que al coche, en el techo, le ha puesto las letras TV. Cuatro lánguidos trozos de cinta adhesiva roja que se supone que deben indicar a los soldados que conducen desde los helicópteros Apache la campaña de asesinatos selectivos contra líderes de Hamás, que no nos disparen, que somos "buenos".

Nos debemos buscar mucho para encontrar casas destruidas por los tanques y misiles. Apenas me bajo del coche la gente se acerca. Todos me quieren mostrar cómo ha quedado su vivienda. Atropelladamente me cuentan lo que les han hecho los soldados, me hablan de vecinos asesinados, de hombres secuestrados. La primera casa que visito es la de Abdeljalil, de catorce años edad, que posa de pie frente al salón de su vivienda. Los tanques llegaron de madrugada y abrieron fuego sin más explicaciones.

Después voy a la vivienda de Amer, una niña de diez años. La fachada está cubierta de huecos provocados por las balas. "Tengo siete hijos y estoy desempleado", me dice Taufik, el padre de Amer, que lleva una camiseta de tirantes y unos viejos pantalones. "¿Te parezco un terrorista? ¿Te parecen mis hijos terroristas? ¿Por qué llegan en medio de la noche y nos disparan? ¿Por qué el mundo no hace nada?"

Sigo recorriendo las casas. Me siento como el flautista de Hamelin. Decenas de niños me siguen. Observan cada uno de mis movimientos. Ríen, juegan. A pesar de todo, la vida continúa.

Otro de ellos, Mohamed, me explica cómo los soldados israelíes entraron, los encerraron en una habitación y utilizaron la planta de arriba, en cuyas paredes hicieron huecos, para situar francotiradores.



No dejan de escucharse explosiones. Misiles que caen cerca de donde estamos. Ante cada estruendo miro con preocupación a Munir, que se ríe. Me sorprende que parezco ser el único que los nota. Los niños, la gente en general, siguen hablando, contándome sus historias, como si no los escuchasen, como si la tierra no vibrase bajo nuestros pies en cada impacto.

Sigo, más casas, más adultos y niños que me cuentan lo que sucedió. Munir no da abasto para traducir ni yo para tomar notas de tanta información, de tanto deseo de contar lo que sucede, de mostrar el dolor que padecen, la injusticia de la que son víctimas.

Después recorro casas arrasadas de cuajo, en las que ya no quedan más que los recuerdos de sus habitantes.
Años de vida, de trabajo, de recuerdos, de lucha, de alegrías, de frustraciones, destruidos en unos segundos.

Busco otros ángulos desde los que describir el sitio a Gaza. Vamos al campo de refugiados de Yabalia. Me llama la atención un dirigible que vuela sobre las casas. Según me explica Munir, graba los movimientos de la gente, escoge los objetivos que luego serán atacados, por lo que su presencia, deduzco, es una señal nefasta para los habitantes de esos barrios.

Además del dirigible, varios aviones de color blanco, sin ocupantes, teledirigidos, vuelan sobre Gaza constantemente. Su sonido, como el de un avión de juguete, me genera una gran desazón. Me siento como un perro en fiestas, mirando hacia todas partes ante cada ruido, cada explosión, cada motor que pasa sobre nuestras cabezas. Y, entre medias, el llamado a la oración que sale desde los minaretes de las mezquitas.

Pasan las horas, cambiamos de bario una y otra vez, y el dirigible, con sus cámaras de vídeo, allí sigue, como una suerte de gran hermano que todo lo ve, que todo lo registra.

Llegamos a una estación de venta de gas. La gente se abarrota en la puerta, hace cola en su interior, junto a las bombonas que han traído desde sus casas. Las reservas están bajo mínimos.

"Hace ocho horas que estoy aquí esperando", me dice un hombre. "No es justo, ¿por qué atacan a la población civil, por qué Israel y Estados Unidos no nos dejan vivir en paz?".
Aunque ya el sol comienza a perderse en el horizonte, el calor sigue siendo agobiante. Y presencio escenas de gente que se pelea, que se empuja. Supongo que consecuencia de la enorme presión bajo la que viven desde hace semanas, de la asfixiante situación en la que están atrapados.



Antes de regresar al hotel noto una gran presencia de hombres armados. Los rumores dicen que hoy habrá un nuevo ataque israelí dentro de esta ofensiva que ya anuncian que durará semanas. Y que, según afirman aquí, estaba planeada desde mucho antes del secuestro del soldado Gilad Shalit, para terminar con el gobierno de Hamás y para detener el lanzamiento de los misiles caseros Qassam (que en cinco años han matado a seis israelíes). Un gobierno que todo el mundo me recuerda en Palestina, fue elegido democráticamente y ahora, en su mayor parte, está en prisión
Los milicianos se multiplican. Amira Hass habla con admiración de muchos de ellos, pues dice que saben que van a morir, que es una batalla desigual, que tienen armas antiguas y carecen de entrenamiento, en contraposición al poderío de las tropas israelíes. Pero también dice que muchos de sus intentos son patéticos, desesperados.

Regreso al hotel. La ciudad de Gaza permanece en la penumbra. Cuando se enciende el generador aprovecho para seleccionar y editar las fotografías. En los momentos en que se va la electricidad, leo junto a una vela el libro de Amira Hass. Desde la ventana observo a una familia que cena en la terraza de su vivienda a la luz de una lámpara de gas.


Ya es de madrugada cuando escucho una gran explosión. Y luego, el sonido de ambulancias. Por la ventana veo fuego en un sector de la ciudad y bengalas que zurcan el cielo. Escucho disparos, nuevas explosiones aunque de menor intensidad.

A primera hora del día, cuando logro conectarme finalmente a Internet, descubro que el misil cayó sobre un edificio mantando a un hombre, su mujer y a siete de sus hijos. El hombre era Nabil abu Silmiya, un profesor y miembro de Hamás, que recientemente recibió un doctorado en Matemáticas de una universidad egipcia. Las edades de sus hijos muertos están comprendidas entre los 16 y los cuatro años. Sólo dos de los niños han sobrevivido al ataque.

También leo con preocupación que los tanques israelíes se han adetrado más en Gaza, apretando el nudo, el cerco, aumentando la presión sobre los palestinos.